miércoles, 29 de mayo de 2013

Oblivion, Joseph Kosinski, 2013

¿Por qué la llaman Olvido si recuerda a tantas películas anteriores?

     Tirando de diccionario Oblivion significa olvido, pero el caso es que cuando ves la película te recuerda enormemente a multitud de otras películas anteriores de ciencia ficción. No es que sea un plagio descarado de ninguna de ellas, ni siquiera sólo aproximado. No es eso, simplemente es que usa tantos elementos ya tratados tantas veces antes en multitud de películas que tienes una sensación de algo “ya visto” puede que no totalmente justificada pero desde luego muy presente.

     Y otra cosa: ¿Por qué lo llaman Ciencia Ficción cuando en el fondo es Acción? En este sentido no es muy distinta de muchas, la mayoría de hecho, de películas de ciencia ficción, grandes o pequeñas, míticas como las de Star Wars o perfectamente desconocidas.

    Pues básicamente esas dos cosas son los mayores argumentos en contra de Oblivion.



    ¿De que va esto? Bueno, pues si has visto el trailer probablemente ya sepas dos tercios de lo que te va a contar la película, pero básicamente, de lo que se trata es de lo siguiente:

    Estamos en el futuro, en el año 2073, la tierra está completamente devastada y no quedan supervivientes en el planeta, pues todos están a salvo en una colonia en Titán, la luna de Saturno,
o en una enorme estación espacial que orbita el planeta camino de irse también.

    La Luna está destruida, y no es más que un montón de gigantescas rocas en el cielo. El mundo está devastado, es un enorme secarral polvoriento donde las ciudades sólo son ruinas (hay que ver lo que les gusta a estos americanos ver escenas de Nueva York, el Empire State y la Estatua de la Libertad reducidos a pedazos). Y eso son las partes buenas, porque las malas son zonas de radiación mortal donde no se puede entrar a riesgo de freírte como en un microondas.

    ¿Por qué? Por lo que nos cuentan en los primeros momentos hace mucho tiempo, casi 60 años, el planeta fue atacado por extraterrestres que intentaron invadirlo, y de paso se cargaron la Luna (no está muy claro el motivo, quizás les estorbaba para aparcar sus naves y querían quedarse con el solar). Pero los humanos se resistieron, lucharon y de hecho ganaron. A un precio enorme, pero granaron: el planeta quedó hecho unos zorros, casi inhabitable, la inmensa mayoría murió y los que sobrevivieron se largaron a Titán.

     ¿Todos?... No. Existe un grupito reducido de equipos de técnicos de mantenimiento, porque los supervivientes están llevándose el agua restante, un recurso natural precioso para obtener
energía, aspirándola directamente de los océanos mediante unas gigantescas plataformas procesadoras.



    Los malos, es decir los invasores que sobrevivieron a la batalla, a los que llaman los corroñeros o scavengers, muy diezmados y debilitados merodean por las ruinas al estilo de los moradores de las arenas del planeta Tattoine, y no les gusta la idea de que los antiguos dueños del planeta se lleven la poca agua que queda, así que sabotean todo lo que pueden.

    Para evitarlo, desde esa estación espacial se controlan unos robots voladores automáticos, unos drones, que, fuertemente armados, patrullan y protegen lo poco que queda por proteger. Pero los drones se averían, y por eso hay repartidos equipos de mantenimiento por el deshabito planeta, para repararlos.
   Y este es el caso de Tom Cruise, que no es otra cosa que un mecánico, aunque tiene una nave voladora muy chula, una moto chula, y un picadero todo exterior al que llaman “torre” con helipuerto y una piscinita muy coqueta, y que comparte con su compañero con el que comparte las largas horas de soledad en el planeta desierto... lo que pasa es que su compañero mecánico no se mancha las manos como él, sólo se dedica al control y enlace con la estación espacial, se llama Victoria, y es una señora que está de muy buen ver .

    Y no puedo contar más sin revelar demasiado del argumento.


    Decía al principio que el problema es que recuerda a multitud de películas. Con lo que he contado seguro que se os viene a la cabeza algunas como El ultimo hombre vivo y su remake Soy Leyenda, o la saga de Galactica, o El planeta de los simios (con antorcha de la estatua de la libertad por los suelos incluida). Pero es que hay más, muchas más, pero por si acaso, las menciono al final en el spoiler. Quizás el problema sea que estos “prestamos” de otras historias están ya en el cócmic original, pues esto se basa en un cómic. No lo se porque no lo he leído.

      Por supuesto, para fans de Tom Cruise será muy recomendable; además al tipo se lo ponen a huevo, con dos mujeres de bandera (Victoria, la que ya tiene) y una recién llegada, rusa, llamada como no podía ser de otra manera Julia Rusakova, que en realidad es una actriz ucraniana (pero bueno, aceptamos ucraniana como animal de compañía) y chica Bond: Olga Kurylenko. Supongo que esto es para que además se puedan meter las correspondientes escenas de romance y el correspondiente ataque de cuernos, quiero decir de celos, de la tal Victoria.

     Tiene sus escenas simpáticas, como las del pequeño santuario que Tom Cruise se construye recuperando objetos que va recogiendo de entre las ruinas, como libros y discos, eso si, de vinilo, que se ve que se conservan mejor que los CD’s, donde va a parar: entre su pequeña discoteca vemos discos de de Duran Duran, de Blue Öyster Cult, de Pink Floyd, de Procol Harum,... y de Led Zeppelin.... ¡hasta tiene hasta buen gusto el hombre!

   Y también está Morgan Freeman, aunque un poco desaprovechado, la verdad, que aquí sería una especie de Morfeo, como hacía Lawrence Fishburne en Matrix.

    Probablemente esa sea la parte de la película que menos me gusta (bueno, salvo el final, que merece capítulo aparte) y que se me hizo un poco más tediosa,  y eso que es la parte con más acción y menos ciencia ficción de la película, o quizás precisamente por eso. Y es que no me acabo de creer a este grupito capitaneado por una especie de Nelson Mandela canonoso secundado por Jaime Lanister como lugarteniente, que queréis que os diga, la verdad.

     Como espectáculo visual la factura es buena, eso hay que reconocerlo. De hecho a mi me pareció interesante y me mantuvo entretenido.


    Como película de acción también está bien. Tiene sus correspondientes batallas, explosiones, persecuciones aéreas volando y disparando entre las paredes de estrechos cañones...


     Y también tiene sus convenientes sorpresitas y giros de guión, aunque la verdad es que muchos de ellos te los hueles y los ves venir desde mucho antes, algunos incluso desde el trailer, que vi hace meses en el cine.
     Pero como película de ciencia ficción se queda cortita y no es demasiado novedosa: la ciencia ficción debería ser más sutil y centrarse en las ideas, y esta película toma demasiadas ideas prestadas de otras.


Seldon
(publicado en El Pobre(cito) Hablador)


   <<<  ¡¡¡ Atención Spoiler !!!  >>>   


     Decía que además de las películas mencionadas hay otras muchas más de las que toma “prestados” ciertos elementos: Mad Max 3, Matrix Revolutions, o si me apuras hasta Matrix, la primera, animes japoneses como Final Fantasy... hasta Tu y yo con la escena de la cita en el Empire State. Y sobre todo Moon, (esta si es ciencia ficción de verdada) que probablemente sea a la que más se parezca.
     No hay que buscarle demasiados pies al gato, porque la coherencia del argumento se te puede acabar yendo al garete. Por ejemplo, vale que los extraterrestres invadan la tierra y la reduzcan a polvo, de acuerdo que aspiren los océanos como si bebieran refrescos con pajita, vale que no sean capaces de acabar con todos, entre ellos con el grupito de Jaime Lanister, ¡pero hombre!, ¿de verdad necesitaban humanos como equipos de mantenimiento? ¿No tienen robots que reparen los drones? De hecho, ¿cuál era su plan de invasión original? ¿Improvisaron sobre la marcha? Porque resulta que a Tom Cruise y a la tal Andrea Riseborough (Victoria) los pillan por casualidad cuando capturan la nave, que, también por casualidad, pasaba por allí camino a Titan cuando llegaban ellos. Y si no los llegan a pillar ¿quien hubiese reparado los drones?

     Y el final merece mención especial (bueno, la escena inmediatamente anterior, antes del epílogo con final feliz). Resulta que tenemos una especie de Estrella de la Muerte como la de Star Wars, solo que piramidal en vez de esférica, resulta que nos la vamos a cargar como en Star Wars: metiéndole un pepino en todo su centro, de hecho solo falta que Cruise pilote el caza entre disparos de las defensas par colarse por un agujerito, pero no, aquí el buen hombre entra por la puerta principal engañando a Sally, el control, o el cerebro de todo el tinglado que es a su vez un versión piramidal reducida de esta estrella de la muerte colocada en su centro, pero con un ojo rojo al estilo de HAL 9000 de 2001.

    Y resulta que aunque Sally es capaz hasta de detectar a distancia el estado de ánimo de Tom Cruise y notar que está nervioso e intranquilo, no es capaz de detectar que lleva una bomba, y que el otro pasajero es Morgan Freeman y no la rusa, la tal Julia, ¡hombrepordiosss!



 

2 comentarios:

  1. Jejej, estamos de acuerdo más o menos. Aunque lo que dices no cuadra con tu 6, me cuadra más con mi 4 :) Te pierde la CF, aunque sea acción, como tú dices.
    Y mi 4 es por Cruise (debilidad) y por el diseño de las maquinitas y las bases, casas futuristas, etc (más debilidad aún). Que si no le ponía un muy deficiente, que es lo que se merece su argumento copieteado y que hace aguas por todos lados. La escena final, de risa, sí.

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...